Entrenamiento y cáncer

«El 40-50% de los cánceres se podrían prevenir adoptando hábitos de vida saludables»

El cáncer constituye una de las principales causas de muerte en todo del mundo. Lamentablemente es difícil no conocer a alguien, ya sea familiar, amigo o vecino que no haya sido afectado directa o indirectamente por esta enfermedad. Y es que, según datos arrojados por la Internacional Agency of Research on Cancer, se prevé que para el año 2040 se diagnostiquen 27 millones de nuevos casos en todo el mundo, lo que supone un 42% más de incidencia que en 2020. Y Si miramos a España (REDECAN) se estima que ésta cifra alcance los 341.000 casos. Si hablamos de tipos de cáncer en nuestro país, el primer lugar lo ocupa el ncer de colon y recto, seguido del de próstata y en tercer lugar el de mama.

Factores como el aumento de la población mundial, su envejecimiento no hacen más que multiplicar los casos. Pero no todos los datos son malos, ya que la tasa de mortalidad en Europa se ha reducido entre un 4-5% entre los años 2015 y 2020 (ESMO) y en España la Tasa de supervivencia se ha duplicado. Y estos datos se explican porque a pesar de que, año tras año, se diagnostican un mayor número de casos, la detección precoz (pruebas de cribado) junto a los avances en el tratamiento y manejo de la enfermedad han permitido una mejora sustancial del pronóstico y por ende un aumento de los supervivientes.

Hoy sabemos que, alrededor del 10% de los cánceres son congénitos; y que, aproximadamente, el 80% lo desencadenan factores externos. Según la Sociedad Española de Oncología Médica entre el 40-50% de los cánceres se podría prevenir adoptando hábitos de vida saludable, como la comida sana y el ejercicio físico.

Pero… Una vez diagnosticada la enfermedad… ¿Es recomendable o perjudicial realizar ejercicio físico? ¿Puedo continuar entrenando si ya lo hacía? ¿Qué ocurre con los efectos secundarios provocados por el tratamiento?

Pues bien, la evidencia científica de mayor grado de recomendación responde lo siguiente:

Una intervención de ejercicio físico mejora significativamente la capacidad física y la calidad de vida de pacientes oncológicos, y esto independientemente de las características clínicas y demográficas. Eso sí, los resultados fueron mejores cuando las intervenciones de ejercicio físico eran supervisadas (entrenador personal). Buffart, L. M.& Col.(2017)

La actividad física disminuye significativamente los niveles de fatiga relativa al cáncer. Torres, D. M., Koifman, R. J., & da Silva Santos, S. (2022)

El ejercicio físico no solamente es efectivo una vez concluido el tratamiento, distintos estudios muestra la efectividad de intervenciones realizadas durante el tratamiento activo, mejorando niveles de fatiga relativa al cáncer, ansiedad y depresión, así como mejorando la calidad del sueño, todo ello contribuyendo a una mejor calidad de vida. Lin, H. P., Kuo, Y. H., Tai, W. Y., & Liu, H. E. (2021)

La literatura científica lleva demostrando, desde hace ya más de 30 años, de forma rotunda y contundente, que el ejercicio físico es beneficioso y debería formar parte del tratamiento oncológico. Sin embargo, ésta evidencia no sirve de nada si quienes lo necesitan no tienen acceso a los beneficios ya demostrados. Entonces… ¿Qué está ocurriendo? Pues lo que sucede es que, actualmente existen multitud de barreras, desde la propia enfermedad a factores socio-económicos, que lo impiden. Siendo la más importante de ellas la falta de recursos tanto materiales como humanos, ya sea dentro del propio sistema sanitario o a la hora de referir a profesionales del ejercicio especializados fuera de los centros hospitalarios.

Desde Sano Zafra queremos hacer un llamamiento a la Unidad Oncológica del área de Zafra-Llerena para que sigan las directrices y recomendaciones de organismos mundiales (la OMS, la European Society For Medical Oncolog Society,  la American College Sport of  Medicine y la Sociedad Española de Oncología Médica) y deriven a sus pacientes y, de ésta forma, poder ayudar a las personas que atraviesan éste sendero.


Referencias:

-Buffart, L. M., Kalter, J., Sweegers, M. G., Courneya, K. S., Newton, R. U., Aaronson, N. K., … & Brug, J. (2017). Effects and moderators of exercise on quality of life and physical function in patients with cancer: an individual patient data meta-analysis of 34 RCTs. Cancer treatment reviews, 52, 91-104.

-Lin, H. P., Kuo, Y. H., Tai, W. Y., & Liu, H. E. (2021). Exercise effects on fatigue in breast cancer survivors after treatments: A systematic review and meta‐analysis. International Journal of Nursing Practice, e12989.

-Torres, D. M., Koifman, R. J., & da Silva Santos, S. (2022) Impact on fatigue of different types of physical exercise during adjuvant chemotherapy and radiotherapy in breast cancer: systematic review and meta-analysis. Supportive care in cancer: official journal of the Multinational Association of Supportive Care in Cancer. [Epub ahead of print]

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