En esta entrevista vamos a ver cómo la actividad física potencia el sistema inmunológico y nos protege de infecciones. Y además, exploraremos también el efecto del ejercicio en las vacunas y si debes realizar actividad física cuando se estás infectado o vacunado.
1. DURANTE LA PANDEMIA SE HA HECHO MUCHO ÉNFASIS EN MEDIDAS COMO LA DISTANCIA SOCIAL, LA MASCARILLA Y EL LAVADO DE MANOS, PERO APENAS SE HA HABLADO DE CÓMO NUESTRO ESTILO DE VIDA AFECTA AL SISTEMA INMUNE. ¿CÓMO AFECTAN ESTOS HABITOS A ESTE SISTEMA?
El sistema inmune es nuestro Ministerio de defensa. Es el que gobierna a nuestros soldados (linfocitos, leucocitos, etc.) hacia la guerra contra los virus y bacterias, además de encargarse de reparar heridas y eliminar células cancerígenas. Por desgracia, ciertos hábitos de vida lo debilita, una mala alimentación y sobre todo el sedentarismo pueden abrir la puerta a todo tipo de enfermedades.
Multitud de estudios evidencian que las personas activas tienen menos riesgos de enfermar por cualquier causa, incluyendo COVID-19 y otras enfermedades infecciosas. Los pacientes de COVID-19 con baja actividad física tienen más del doble de riesgo de hospitalización y muerte que los activos.
2. ¿ES VERDAD QUE EL EJERCICIO INTENSO SUPRIME EL SISTEMA INMUNE?
Es cierto que después de grandes esfuerzos, como correr una maratón, se desploma la inmunoglobulina A (IgA) en la saliva y los linfocitos T en la sangre. Además esta afirmación está apoyada en estudios que evidencian que los atletas reportan más infecciones alrededor de las competiciones. Sin embargo, nuevas investigaciones cuestionan esta idea; Para empezar, muchas cosas cambian en la vida de los atletas durante las competiciones: sufren más estrés, viajan más, pasan más tiempo en aviones, duermen peor… Estos factores podrían explicar por sí solos un mayor riesgo de infección.
Por otro lado, la actividad física intensa parece cambiar la localización de las células inmunes, haciéndolas migrar desde la sangre y la saliva hacia nuestras barreras principales, como la mucosa respiratoria o el intestino. Esto podría explicar la reducción de los «soldados» del sistema inmunitario en las analíticas clásicas, sin implicar que haya, en realidad, una menor protección.
Por tanto, el efecto real del ejercicio muy intenso en el sistema inmune no está claro, pero no hay duda de que el verdadero peligro es el sedentarismo.
3. Y SI ME INFECTO…¿DEBO SEGUIR HACIENDO EJERCICIO?
No tenemos buenos estudios en humanos para saber si durante una infección debemos reposar o mantenernos activos, pero quizá podamos aprender algo de los ratones. En un estudio reciente infectaron a ratones con el virus de la gripe, y los dividieron después en tres grupos:
. Un grupo hizo ejercicio moderado.
. Otro hizo ejercicio extenuante.
. El último no hizo ejercicio (grupo de control sedentario).
Como conclusión, los ratones que realizaron ejercicio moderado tuvieron una supervivencia muy superior a los sedentarios (82% vs. 43%).
Otra cuestión es que no te encuentres bien, el malestar que produce la activación inmune es precisamente una estrategia para que no derrochemos demasiada energía en otras actividades. Como recomendación general podríamos decir que debemos mantener la actividad física en la medida que nos lo permitan los síntomas, pero sin forzar.
4. DURANTE TODA LA PANDEMIA QUE, LAMENTABLEMENTE AUN NO HA ACABADO, HEMOS SEGUIDO LOS TERRIBLES DATOS DE HOSPITALIZACIÓN Y FALLECIMIENTO POR COVID, CEBANDOSE EN AMBOS CASOS EN LA POBLACIÓN MÁS MAYOR Y VULNERABLE. ¿PODRIA SUPONERSE QUE UN SISTEMA INMUNOLÓGICO “DEPRIMIDO” PUEDE ESTAR DETRAS DE MUCHOS DE ESTOS CASOS?
El envejecimiento es proceso biológico natural que afecta a todo nuestro cuerpo, y el sistema inmune no está exento. Sin embargo, investigaciones recientes indican que esta degradación tiene más que ver con la inactividad que con la edad.
Un estudio reciente, por ejemplo, evaluó la función inmunitaria de 125 ciclistas amateur, de entre 55 y 79 años. La comparó después con la de un grupo sedentario de la misma edad y con un grupo de jóvenes, de entre 20 y 36 años.
Aunque la edad se deja notar, muchas funciones del sistema inmune en los deportistas mayores se parecían más a las de las personas jóvenes. Estudios similares demuestran que las personas mayores que se mantienen activas están mejor protegidas contra infecciones, y unas pocas semanas de entrenamiento son suficiente para ver mejoras en el sistema inmune.Y no son necesarios grandes esfuerzos.
5. AHORA QUE COMPROBAMOS QUE SE ESTA ACELERANDO EL RITMO DE LAS VACUNACIONES…¿QUÉ EFECTO TIENE LA VACUNA EN EL ORGANISMO DE UN DEPORTISTA FRENTE A OTRO SEDENTARIO?
Volvemos a apoyarnos en la literatura científica para comprobar, de nuevo, que el ejercicio potencia el efecto de las vacunas, elevando por ejemplo el número de anticuerpos producidos. Cuando comenzó la campaña los sanitarios, en general, aconsejaban no realizar ejercicio de intensidad moderada o intensa durante las 48 horas posteriores a la inoculación. No obstante…en la medida de lo posible, mantén también la actividad física los días posteriores a la vacuna, pero ajustando la intensidad según cómo te sientas.
En SANO ZAFRA tratamos en nuestro día a día con personas que han pasado la enfermedad y aún no se han recuperado o siguen con síntomas que les limitan sus actividades diarias.
Por este motivo, hemos decidido abrir un nuevo SERVICIO DE REHABILITACION POST COVID
Si sigues sufriendo las secuelas del virus…¡podemos ayudarte!
